La contratación de seguros de salud se ha convertido en una prioridad para gran parte de la población. Esta contratación es una decisión voluntaria que toma una persona para cubrir cualquier tipo de riesgo relacionado con la salud.

Sin embargo, el derecho de un usuario a contratar un seguro no quiere decir que la compañía no pueda decidir si ofrece o no el aseguramiento. Si la aseguradora no quiere asumir un determinado riesgo, puede optar por no dejarle contratar el seguro.

Principales razones por las que una aseguradora se niega a la contratación de un seguro de salud

En la política de suscripción de cada una de las compañías vienen recogidas las normas por las que se puede negar a esta contratación. Existen diferentes motivos, pero los principales son los que podrás ver a continuación.

La edad

En este caso, puede ser porque la propia compañía te exija tener una edad determinada o porque la propia legislación así lo indique. La gran mayoría de aseguradoras exigen que el tomador de la póliza sea mayor de edad.

Personas que estén por encima de los 65 años también pueden encontrar problemas a la hora de llevar a cabo una contratación de un seguro de salud. En cada compañía pueden tener una política de suscripción diferente en cuanto a la edad máxima para contratar o para incluirse como asegurado en una póliza de seguro de salud.

La residencia española

Existen determinados seguros de salud que exigen que la persona que va a ser asegurada debe tener la residencia en España para poder contratar la póliza.

Siempre existen determinadas excepciones, por ejemplo, si tienes la nacionalidad española, pero no resides en nuestro país todo el año, puedes llegar a un acuerdo con la aseguradora. También se puede dar el caso contrario, extranjeros que viven en España, pero no han obtenido la residencia. En este caso, algunas compañías permiten que contraten un seguro de salud mediante la presentación del pasaporte. Lo habitual en estos casos es que el pago de la prima deba ser abonado de manera anual.

En ambos casos es conveniente que se consulta previamente con la compañía o con la correduría.

Actividad o profesión

En muchos casos, el hecho de tener profesiones de riesgo como puede ser policía, bombero, actor de doblaje, torero, pueden ser motivos por los que una compañía no suscriba pólizas de accidentes y también de salud debido al incremento del riesgo.

Preexistencias

Las preexistencias en los seguros de salud es uno de los temas más conflictivos, ya que puede tratarse de enfermedades que no conozcas antes de contratar el seguro o incluso enfermedades ya superadas, pero que la compañía siga considerando un riesgo. Las más problemáticas pueden variar según los casos y según las compañías, pero suelen ser las siguientes:

  • Oncológicas: tumores benignos que no hayan sido todavía resueltos o malignos que estén en fase de curación. Es importante aclarar que la fase de curación de este tipo de enfermedades comprende determinados años posteriores a la última terapia.
  • Oftalmológicas: retinitis y glaucomas.
  • Cardiovasculares: cardiopatías isquémicas, hipertensión arterial, miocardiopatías, arritmias crónicas, aneurismas, etc.
  • Neurológicas: enfermedades cerebrovasculares, neurológicas congénitas, secuelas neurológicas postraumáticas, epilepsias que no responden a ningún tipo de medicación, etc.
  • Psiquiátricas: demencias, adicciones, bulimias, síndromes depresivos, autismo, etc.
  • Digestivas: pancreatitis crónicas, úlceras gástricas, cirrosis, enfermedad inflamatoria intestinal, etc.
  • Del aparato respiratorio: hipertensión pulmonar, asma, enfermedad fibroquística, etc.
  • Postransplantes: hepáticos, cardíacos, pulmonares, de médula ósea, etc.

La compañía puede negar la contratación de una póliza de salud a aquellas personas que padezcan algunos de estos problemas. De hecho, en este tipo de seguros, la aseguradora hace rellenar al solicitante un cuestionario de salud en el que debe responder si padece o ha padecido algún tipo de enfermedad. Si padece algún tipo de dolencia y no ha avisado a la compañía, en el momento que tenga algún problema relacionado, esta puede negarse a pagar la indemnización.

En definitiva, la contratación de seguros de salud te puede aportar una enorme tranquilidad. Eso si, debes contratar la póliza antes de que sea tarde por alguna de las razones arriba mencionadas. No esperes a que aparezca una enfermedad para contratar el seguro, ya será tarde. Mejor prevenir y disfrutar de la tranquilidad de estar cubierto. Recuerda, para poder contratar un seguro de salud debes cumplir una serie de requisitos y haber informado a la aseguradora de cualquier tipo de enfermedad que padezcas en la actualidad o hayas podido sufrir en el pasado.

Para la contratación de cualquier seguro es recomendable contar con un mediador especializado, pero en los seguros de médicos, contar con el asesoramiento de una correduría de seguros de salud es fundamental. En Aon Salud, estamos a tu disposición.

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